Revelación Impactante: ¿Acaso las Pirámides de Guiza son Más Antiguas que los Faraones por Miles de Años?

La meseta de Giza es el lugar donde se encuentran las estructuras más antiguas y misteriosas. Junto a la Gran Pirámide y la Pirámide de Kefrén, hay 8 pequeños restos de pirámides cerca de ellas. Desde que se iniciaron las investigaciones sobre las pirámides de Giza, siempre ha habido alguna duda sobre la versión que dice que su construcción fue en la IV dinastía (2600 a. C.).

Muchos arqueólogos han creído en la teoría de que las pirámides egipcias fueron construidas por trabajadores antiguos con herramientas y tecnologías sencillas, pero siempre han puesto en duda esta teoría. La razón para dudar de esta teoría no es solo el impresionante tamaño de las pirámides en sí, sino también la complejidad de su diseño.

En primer lugar, la forma de las pirámides y otras estructuras construidas cerca de ellas, incluida la Casa de la Eternidad y las Mastabas, no tienen ninguna similitud. En segundo lugar, es imposible mover manualmente estos bloques de piedra de 200 toneladas a tal altura. En tercer lugar, casi no hay espacio entre los bloques enfrentados de las pirámides. Es un trabajo increíble incluso hoy en día.

Desde entonces se han propuesto muchas versiones diferentes sobre la construcción de las pirámides de Giza por parte de los antiguos egipcios, pero siguen existiendo dudas sobre su validez.

El geólogo John Anthony West y el profesor de Ciencias Naturales Robert M. Schoch concluyeron que la erosión de la Gran Esfinge no es resultado de la influencia del viento, sino del agua, y que se produjo miles de años antes de la aparición de los faraones que crearon el Imperio Antiguo.

Se suponía que la erosión hídrica de la Esfinge podría haberse debido a la inundación del Nilo, pero según Schoch, si esa fue la razón, entonces “las inundaciones habrían socavado el monumento desde su base. En cambio, la erosión más grave aparece en la parte superior de la Esfinge y en los muros que la encierran. Este patrón es más consistente con la lluvia desde arriba, en lugar de las aguas de la inundación desde abajo”.

En la época de los faraones, el clima egipcio ya era seco y las lluvias podrían haber cesado hace miles de años. Algunos investigadores creen que la piedra caliza original utilizada para construir la Esfinge se degradó rápidamente, pero no es posible, ya que de lo contrario la estructura habría desaparecido hace 500 años. Al final, muchos geólogos profesionales apoyaron la versión presentada por West y Shoch.

El egiptólogo Selim Hassan escribió en su libro “La Esfinge, su historia a la luz de las excavaciones recientes” lo siguiente:

“Si diéramos crédito a sus inscripciones, tendríamos que atribuirle a Keops la reparación de la Esfinge, aparentemente después de que hubiera sido dañada por un rayo. De hecho, puede que haya algo de verdad en esta historia, ya que la cola del tocado de nemes de la Esfinge ciertamente falta, y no es una parte que, debido a su forma y posición, pudiera romperse fácilmente, excepto por un golpe directo de algún objeto pesado, asestado con una fuerza terrible. De hecho, se puede ver en la parte posterior de la Esfinge la cicatriz de esta rotura, y rastros del antiguo mortero con el que fue reparada. Esta cicatriz mide unos 4 metros, lo que concuerda con las medidas registradas en la estela; los 30 cm adicionales de daño pueden haberse producido fácilmente en la última destrucción de la cola del nemes. Por lo tanto, es quizás probable que la Esfinge fuera alcanzada por un rayo, pero no hay ni una partícula de evidencia que demuestre que este accidente ocurrió durante el reinado de Keops”.

Los dos templos situados justo delante de la Esfinge también fueron construidos mucho antes de los primeros faraones. Así lo indica también el desagüe del muro occidental del Templo de Granito. ¿Por qué necesitarían los faraones un desagüe en el clima cálido y seco de Egipto en la meseta de Giza?

Esto indica que el templo fue construido en una época en la que había un problema con el drenaje del agua de lluvia. Por ello, los geólogos concluyeron que tanto los templos como las pirámides principales no fueron construidos durante la IV dinastía, sino miles de años antes de los faraones.